miércoles, 19 de junio de 2013

Inspiración

No te vayas de mi vida,
tú me inspiras,
inspiración que se traduce en poesía.

Mil maneras de imaginarte,
mil maneras de sentirte,
mil maneras de demostrarte
que en mi mente vives,
y no quiero que te vayas,
quédate aquí conmigo,
contigo mi mente viaja,
hacia lejanos destinos.

Destinos que algún día alcanzaré,
y te llevaré conmigo
a un lugar lejano,
donde con solo rozar tu mano
me enseñes el camino.

Camino que conduce
a un lejano destino,
en el que los sueños se cumplen
y al que solo quiero llegar contigo,
pues tu inspiras mi mente,
mientras con mi mano escribo,
todo lo que ella me ofrece,
cuando sueño contigo.

No te vayas de mi vida,
tú me inspiras,
inspiración que se traduce en poesía.

Topy

lunes, 13 de mayo de 2013

Quiero mover el mundo


- Imagínate esta situación: conoces a una persona, alguien que no esperas, que llega de repente, sin avisar, cuando tus fuerzas más fallan, y te hace de apunto de apoyo para que tú, con el mínimo esfuerzo, puedas mover el mundo, mundo que en poco tiempo pasa a girar en torno a ella. Le regalas cada día de tu vida, no ves el momento de volver a estar a su lado, de ir a buscarla y que te reciba con un beso, uno de esos que te hacen perder la razón y la noción del tiempo. De repente te das cuenta de que tus esquemas están fallando, algo no va bien, sólo tienes una cosa en mente y solo te apetece hacer una cosa; estar con ella. Todo aquello que creías que nunca más ibas a poder sentir por alguien, todos esos sentimientos especiales que te hacen poner el mundo boca abajo, vuelven a aparecer dentro de ti. Lo das todo, incluso hasta lo que no puedes dar, la cuidas, la mimas, la quieres, la proteges… Y un buen día decide que ya no quiere que muevas el mundo, deja de ser tu punto de apoyo y tu mundo se desploma, todo se viene abajo. Empiezas a sentir miedo, inseguridad, pero a pesar de ello tú sigues a su lado, como un buen día decidiste prometerle, porque tu cumples con tu palabra y si lo dices lo haces, eres así. Promesa que te cuesta ejecutar, no es fácil ver como tu apoyo ahora mueve otro mundo, uno que no es el tuyo. De repente, deja de mover mundos, ya no quiere ser el apoyo de nadie y eso te hace pensar en que puedes recuperarla, en que todo puede volver a ser igual. Tu cabeza, sin ayuda de nada ni de nadie comienza a crear un universo paralelo, universo que sabes que nunca se va a hacer realidad pero te hace sentir bien, es tu mundo y no quieres que nadie lo destruya. Pero llega la hora de la verdad, recapacitas, piensas y te das cuenta de que todo son ilusiones, de que eso nunca va a llegar a buen puerto y de nuevo empiezas a sentir inseguridad y miedo. Odias sentirte así, te gusta tener el control de la situación y esta se te escapa de las manos, no sabes que sientes por tu punto de apoyo lo que te lleva a pensar que te vas a volver loca. No sabes que hacer, sigues adelante, echas el freno de mano, te dejas llevar… ninguna de las opciones te convence realmente pero no consigues volver a sentirte igual que antes, como hace tan solo un par de meses, cuando todavía no la conocías, tu seguridad ha desaparecido, tus miedos han vuelto, y tú sabes que solo una cosa podría evadirte de todo eso y devolverte la seguridad, sólo una, tu punto de apoyo.
¿Alguna vez te has sentido así?

- Creo que sí…

- Pues así es como me siento yo.

jueves, 2 de mayo de 2013

Quédate a mi lado

Hoy el cielo está triste,
no deja de llorar,
exactamente como mis ojos,
si te ven marchar.

Quédate a mi lado,
déjame ser feliz,
recuerda todo lo que te he dado,
todo lo que te he hecho sentir.

Acurrúcate en mi pecho,
y escucha mi respiración,
ahora es tranquila,
porque te siente como yo.

Relájate conmigo,
déjate transportar,
al mundo de los sueños,
donde se hacen realidad.

Prometo hacerte feliz,
prometo a tu lado siempre estar,
cuando me necesites,
cuando quieras felicidad.

Quédate a mi lado,
déjame hacerte feliz,
recuerda todo lo que te he dado,
todo lo que te he hecho sentir,
recuerda sólo,
cuando eras feliz.

jueves, 7 de febrero de 2013

Ayer me acorde de ella


Ayer me acordé de ella,
la imaginé entre mis brazos,
apoyada en mi pecho,
contándome un secreto.

Sus ojos me observaban,
y los míos, inocentes
buscaban su mirada,
mirada que penetra,
en lo más hondo de mi,
mirada que recuerdo,
al no tenerla aquí.

Sus manos, liberadas,
recorrían mi cuerpo,
y mi cuerpo respondía
con un agradable cosquilleo.

Y sus labios se acercaban,
y los míos no se resistían,
era inevitable querer juntar
su boca con la mía.

Y nos fundimos en un dulce beso,
y estallan todos mis sentidos,
ya no se como me siento,
el control está perdido.

Ese momento tuyo y mio


Muero de ganas de verla,
de tenerla entre mis brazos,
de mostrarle en un beso,
todo lo que he callado,
y es que las noches son largas
cuando no la tengo a mi lado.

Con tan solo el roce de su piel,
es capaz de llevarme al cielo,
transportarme como si fuese un sueño,
hacerme sentir especial,
libre,
y nunca querer bajar.

Sus labios junto a los mios
producen una extraña sensación,
pasión,
la que corre por mis venas,
la que fluye lenta,
y parece no tener prisa,
ella misma se dosifica,
y produce un extraño placer.

Que no termine este momento,
es lo que más deseo,
que no me deje de rozar,
todavía no quiero bajar.

Y me deja acariciarla,
su piel está bajo mis mano,
que recorren su cuerpo desnudo,
no se detienen ni un segundo,
entonces la locura me invade,
y quiero parar el mundo,
mundo que en ese momento nos rodea,
mundo que está siendo testigo,
de lo que allí se desea,
de ese momento tuyo y mío.

En manos del destino


La locura me ha atrapado
no me deja escapar
me tiene presa de sus garras
tú de aquí no te vas.

Yo solo pienso en huir,
ella me pide un ratito más,
es imposible negárselo,
es lo que quiero en realidad.

Pasar más tiempo a su vera,
no dejarla jamás,
me encanta esta sana locura
¿he de dejarme llevar?

Pero la cordura irrumpe de nuevo,
dice que me va a salvar
de esta irresistible locura
y no se como acabará,
pues es una lucha a muerte
aunque no haya sangre que derramar,
quien mejor utilice sus armas
de mi corazón se ocupará.

Quedo en manos del destino
que está loco de atar,
no se que me tiene preparado
no se si será la lucha final,
pues aunque mi razón es fuerte,
mi corazón sabe hacerse notar.

Despues de ponerse el sol


Tocar con mis dedos la luna
después de ponerse el sol,
pues hoy está bella como ninguna,
incluso desprende calor,
calor que inunda mis sentidos
si aquí la siento yo
me gusta tenerla cerca
después de ponerse el sol.

La oscuridad es nuestra amiga,
somos dos cuerpos al mismo son,
cuerpos que se aman en la noche,
amor que solo conocemos tú y yo,
pues nadie más nos acompaña,
no necesitamos más calor,
es suficiente el que ella desprende
después de ponerse el sol.

Y al rozarme toco el cielo,
siento latir mi corazón
se me acelera el pulso
cada vez que escucho su voz;
y en la noche yo la busco
y la acerco a mi,
y a su oído, en un susurro,
decirle que se quede aquí,
que se quede para siempre
que no se vaya de mi lado
que como yo podría quererle,
nadie puede imaginarlo,
después de ponerse el sol.

Luz


Noches perdidas entre pensar y pensar,
sueños logrados a base de soñar,
soñar con los ojos abiertos
y poder apreciar la luz,
luz que desprenden tus ojos,
luz que solo provocas tú.

Déjame soñar contigo,
forma parte de mi,
antes todo estaba oscuro,
ahora todo vuelve a revivir.

Has iluminado mis sueños,
has aparecido así,
has salido de la nada,
y te has colado en mi.

Y has puesto mi vida patas arriba,
le has dado un vuelco a mi corazón,
vuelco que a gritos pedía,
pero se quedó sin voz.

Yo también quiero guardar tus sueños,
quiero que pienses en mi,
quiero ser parte de tu mundo,
ese mundo en el que eres feliz.

Dejame parar el mundo


Tocar con mis dedos
cada centímetro de ti
y enredarnos en un beso
que provoque el frenesí.

Ven, apoyate en mi pecho,
escucha mi corazón latir,
se acelera poco a poco
cuando estás cerca de mi.

Evadirme en tu cuerpo desnudo
y acostarme junto a ti,
darte un beso profundo
y sentir mi cordura morir.

Déjame sentir tu cuerpo,
déjame parar el mundo,
deja que sean mis labios
los que marquen los segundos.